La
intervención se sitúa en una zona de la Villa de Ingenio donde predomina el uso
residencial, ya sea en edificaciones de viviendas unifamiliares o de bloques
residenciales, generalmente entre dos y tres plantas y con presencia de bajos
comerciales en algunas de ellas.
El
edificio se destina en su totalidad a uso residencial, con tipología de
vivienda unifamiliar entre medianeras, y sobre la rasante, por lo que no
presenta sótano o semisótano.
La vivienda se desarrolla en dos plantas sobre
rasante, retranqueada de la Avenida de América dentro del área de ocupación
determinada por el planeamiento. Este retranqueo considera el espacio libre
como primer nivel de ingreso a la edificación, donde se define una zona
destinada a terraza y otra a aparcamiento de vehículos, diferenciadas en su
tratamiento y altura y separadas con una franja verde interrumpida únicamente
por la escalera que las conecta.
Al situar los aparcamientos en el nivel inferior se
elimina el contacto visual directo desde el interior de la vivienda con los
vehículos y permite la apertura de huecos con generosas dimensiones en la
fachada sur, siendo esta orientación la fuente de mayor radiación solar,
necesaria para alcanzar el confort interior sin necesidad de recurrir a
elevados consumos energéticos.
Así mismo, al separarse de la Avenida de América y ejecutar una falsa fachada como señala el planeamiento municipal, este primer espacio libre disminuye el efecto del ruido sobre la fachada propia de la vivienda favoreciendo el confort acústico interior.
El programa de usos propios de la vivienda recibido
por parte del promotor se desarrolla en dos plantas, situando en la planta baja
la mayor parte de las estancias significativas, de manera que se puedan cubrir
todas las necesidades vivideras en un mismo nivel.
En la segunda planta se ubican dos dormitorios y un
baño en un volumen de dimensión significativamente menor que el de la planta
inferior, liberando el espacio libre en la parte posterior de la parcela. Este
volumen también se manifiesta en el alzado sur al volar sobre el plano vertical
de la fachada, acentuado formalmente mediante una franja que recorre desde la
parte inferior a la superior la composición geométrica de la misma.
Los distintos espacios y usos en la planta baja
adoptan una disposición en 'U' en torno al patio interior que los organiza. En
este sentido, se produce una relación directa entre el espacio libre y las
estancias principales que lo envuelven, no solo aportando continuidad visual,
sino ampliando el programa funcional de
la vivienda, de su uso y disfrute.
El espacio libre del que disfruta la vivienda no se
refiere exclusivamente a la planta baja, ya que en el nivel superior se
aprovechan las cubiertas, resultado de la mayor ocupación en planta baja, para situar
unas terrazas accesibles total o parcialmente.